PROGRAMA 2023

Nuestro planeta sufre el flagelo de varias guerras: en Ucrania, en Yemen, en Palestina y otras. Por esa causa nuestro programa: ecologista, feminista, democrático, que defiende los derechos humanos, debe expresar su rechazo a la guerra en todas sus manifestaciones. A pesar de que hablamos del programa para el Ayuntamiento de Barcelona el tema nos compete y no solo como expresión de apoyo al pacifismo. El estado español forma parte de la OTAN que, en su momento (1949), fue creada como organización armada para hacer frente a la expansión del sistema socialista. Su objetivo terminó con la disolución de la URSS sin embargo sigue en plena actividad, inclusive en países no adheridos como Ucrania donde desarrolla plena actividad desde 2014 (según surge de documentos y declaraciones de testigos inobjetables). Además se ocupa de diseminar bases por diversas regiones del planeta con el único objetivo de mantener la más que cuestionada hegemonía de los EEUU. El viejo Atlantismo por su parte, sigue siendo protagonista, adhiriendo en forma incondicional a la propuesta norteamericana. El Parlamento europeo está dominado por partidos de derecha y extrema derecha que no dejan de avanzar. Port otra parte. partidos políticos progresistas que hace no muchos años eran ecologistas y defensores de la paz como los verdes alemanes se han volcado a la derecha voceando su apoyo a la guerra y al armamentismo. La carrera armamentista solo beneficia a los fabricantes de armas que, en general, son Estadounidenses o socios de ellas. En contrapartida los países europeos padecen el conflicto por varios frentes: en encarecimiento de los combustibles, la inflación, los recortes de los planes sociales, etc. que perjudicarán especialmente a los sectores medios y pobres. Para desarrollar su propuesta Barcelona necesita un escenario de paz. No resulta difícil imaginar que de incrementarse el escenario bélico nuestro programa corre peligro, en ese contexto nuestras propuesta caerían como un castillo de naipes. Según los analistas, los EEUU tienen una evidente superioridad sobre las fuerzas rusas por armamento, tecnología etc. enfrente Rusia, es una importante potencia nuclear, por ese motivo de no mediar conversaciones de paz, la guerra puede prolongarse en el tiempo con lo que Europa y el resto de la humanidad seguirá sufriendo el flagelo ignorando cual será el final. Por eso debemos insistir en la realización de inmediatas tratativas de paz, solicitar una reducción del presupuesto militar y también reclamar el incremento de los impuestos a las empresas que se benefician con la guerra, destinando esos fondos a fines sociales, tan necesarios para los Ayuntamientos de toda España.